La Dieta HCG - Descripción
La ingesta diaria de la hormona placentaria HCG proporciona al cuerpo una sensación natural de saciedad. Esto es causado por el hecho de que el cuerpo se pone en un estado hormonal similar al embarazo y siempre quiere mantener el nivel de azúcar en la sangre.
Perder peso en las zonas problemáticas
El metabolismo se estimula de modo que las grasas de depósito y de almacenamiento (depósitos de grasa resistentes a la dieta) se movilizan y se funden. La ingesta de HCG con una dieta especial provoca la pérdida de peso, especialmente en las zonas problemáticas típicas, con la excepción de la cara y el pecho femenino.
Hacer dieta sin pasar hambre
Es interesante observar que no hay absolutamente ninguna sensación de hambre. La ingesta de HCG asegura que el nivel de azúcar en la sangre se mantiene siempre en un nivel mínimo y no hay hipoglucemia, que por lo general causa antojos de alimentos. El centro de la saciedad (hipotálamo) se reprograma y uno vuelve a sentirse lleno al comer y se siente bien.
Potencia y energía
HCG también tiene un efecto de mejora del estado de ánimo, lo que significa que usted está lleno de vigor y energía. Usted es plenamente operativo, incluso si usted está llevando a cabo actividades físicas pesadas o hacer deporte. Además, los resultados se aprecian con relativa rapidez y la persona se siente motivada para seguir adelgazando hasta alcanzar por fin su silueta ideal. A pesar de una gran reducción de volumen (de 5 a 10 kg en cuatro semanas), este eficaz método produce los resultados más bellos, sin arrugas y con una clara mejora de la posible celulitis.
Preguntas frecuentes sobre la dieta HCG
¿Qué es la HCG?
HCG (hormona gonadotropina coriónica o la llamada Hormona placentaria) es una hormona natural que se produce durante todos los embarazos y moviliza los depósitos de grasa de la madre para producir energía cuando es necesario. Esta hormona se produce en la placenta y es completamente neutra. ¿Cómo funciona la HCG? La HCG inyectada -en combinación con una dieta especial- provoca el acceso a los depósitos de grasa en las zonas problemáticas. Sólo a través de la influencia de la HCG se puede eliminar esta "grasa anormal" de los depósitos, de forma similar al embarazo, donde un embrión necesita un suministro ideal de nutrientes. La sangre de la madre debe estar siempre saturada de nutrientes, independientemente de si come o no. La HCG produce la saturación constante de la sangre. Al mismo tiempo, también se estimula el metabolismo de la tiroides, lo que conduce a un aumento de la quema de grasa.
¿Dónde se produce la HCG?
Esta hormona se produce en la placenta y es completamente neutra.
¿Por qué se puede perder peso con la dieta HCG?
HCG produce la saturación constante de la sangre. Al mismo tiempo, también se estimula el metabolismo de la tiroides, lo que conduce a un aumento de la quema de grasa.
¿Cómo se lleva a cabo la dieta HCG?
Tras una consulta detallada y una aclaración médica, se le administrará una inyección dos veces por semana (durante 6-8 semanas).
¿Qué efecto tiene la HCG inyectada en la dieta?
Junto con la reducción de calorías, accede a los depósitos de grasa de las zonas problemáticas del cuerpo y los convierte en grasa normal.
Esta "grasa anormal" sólo puede eliminarse de los depósitos mediante la influencia de la HCG, de forma similar al embarazo, en el que un embrión requiere un suministro ideal de nutrientes.
¿La dieta está controlada por un médico?
Un control semanal en la consulta supervisa el progreso y el éxito positivo de su dieta HCG.
¿Por qué no reducir las calorías como en otras dietas?
Con una dieta responsable, casi todo el mundo pierde peso. Sin embargo, son sobre todo los músculos y el tejido conjuntivo los que se descomponen. Debido al ataque a las reservas normales de grasa, las personas que siguen dietas de adelgazamiento convencionales parecen agotadas y envejecidas y suelen sentirse cansadas y apáticas. Tampoco es posible mantener constantes los niveles de azúcar en sangre con las dietas convencionales.
¿Cuál es la diferencia entre HCG y la reducción de calorías?
Sin embargo, la reducción de calorías con la adición de HCG aumenta el bienestar y el rendimiento, ya que esto es lo que la naturaleza pretendía para el embarazo. A pesar de la enorme reducción de calorías, la sangre se suministra con nutrientes suficientes gracias a la ingesta de HCG y no hay síntomas de deficiencia.
Dieta HCG, ¿de qué tengo que prescindir?
Básicamente, usted puede comer lo que quiera en la dieta HCG. Sin embargo, debe abstenerse de añadir potenciadores del sabor (por ejemplo, glutamato, Maggi, etc.). También debe eliminar de su dieta el alcohol (inhibe la pérdida de grasa), el azúcar y los carbohidratos como las patatas, el pan, la pasta, el arroz y cualquier cosa dulce.
Por otro lado, hay que aportar al organismo los aminoácidos esenciales, las vitaminas y los oligoelementos que el cuerpo no puede producir por sí mismo. Éstos se encuentran principalmente en las verduras (por ejemplo, ensaladas de hojas verdes, calabacines, tomates, zanahorias, coles, espinacas, brotes de soja y muchos más). Es esencial una ingesta diaria de 2 a 3 litros de agua. Cualquier ingesta de proteínas es deseable y está permitida.
¿Qué es especialmente importante en la dieta HCG?
Beba agua Una ingesta diaria de 2 a 3 litros de agua.
¿Por qué HCG y no sólo la reducción de calorías?
Casi todo el mundo pierde peso con una dieta de 500 a 700 calorías. Sin embargo, esto implica principalmente la degradación de los músculos y del tejido conjuntivo. Debido al ataque a las reservas normales de grasa, las personas que siguen dietas de adelgazamiento convencionales parecen agotadas y envejecidas y suelen sentirse cansadas y apáticas. Tampoco es posible mantener constantes los niveles de azúcar en sangre con las dietas convencionales. Una dieta especial con la adición de HCG, sin embargo, aumenta el bienestar y el rendimiento, ya que es lo que la naturaleza previó para el embarazo. A pesar de la enorme reducción de calorías. La sangre recibe suficientes nutrientes gracias a la ingesta de HCG y no se producen síntomas de deficiencia.